¿Dónde está Miguel? Continúa la búsqueda en enero
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“Terminamos un año y empezamos otros enfrascados en una nueva búsqueda…..Seguimos preguntando ¿Dónde está Miguel?, como cada día desde hace 17 años, y su familia y sus amigos no bajamos los brazos. Tenemos expectativas que esta búsqueda sea la última, que este dato sea el verdadero, que se acabe esta angustia y esta agonía interminable”, dijo Rosa Bru, mamá de Miguel Bru, al conocer los resultados negativos sobre los restos óseos hallados en el marco del rastrillaje que se realiza en Berisso desde el 20 de diciembre.
Esta búsqueda se suma a los casi 40 rastrillajes realizados durante estos años para encontrar a Miguel, secuestrado, torturado, asesinado y desaparecido por policías de la Comisaría Novena de La Plata el 17/8/93.
Los resultados de los análisis realizados sobre los huesos hallados el martes 28 de diciembre barrieron una vez más con las esperanzas de Rosa y Néstor Bru, al concluir que eran de animales. El miércoles se encontraron 20 elementos óseos, de los cuales dos podrían ser humanos, indicó el fiscal Fernando Cartasegna. Mientras, la familia y amigos de Miguel esperan que el lunes esté dispuesta una máquina de talar que prestará la Municipalidad de Berisso, para retomar el rastrillaje ese día. Sino fuera así, la búsqueda podría retomarse el 10 de enero.
La búsqueda de Miguel Bru, a cargo de Cartasegna y la forense Mercedes Lojo, se realiza en un cañaveral en las calles 13 C y 170, en Berisso. Esta semana se amplió sector del rastrillaje a otros sectores del lugar. El fiscal explicó que la máquina que prestaría la Municipalidad de Berisso, permitiría talar todo el terreno de forma cuidadosa, preservando la superficie, e incluso remover la tierra a pocos centímetros sin provocar rupturas de lo que pudiera encontrarse. El operativo se retomaría el próximo lunes en caso que ya se disponga de esta máquina, sino recién el 10 de enero debido a las altas temperaturas que dificultan el trabajo de los bomberos de Berisso y Ensenada, a cargo de las tareas.
Desde que comenzó la búsqueda y hasta el martes pasado, se hallaron bajo un metro de tierra restos óseos, que fueron identificados como de procedencia de animal por un paleontólogo y una antropóloga del Museo de Ciencias Naturales de la UNLP. También se encontraron objetos como trozos de tela, un anillo, suela de zapatilla, una sandalia, un portadocumentos, que según Rosa Bru no recuerda que pertenecieran a su hijo.
¿Dónde está Miguel? El estudio de los huesos fue negativo
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Los estudios realizados sobre los huesos hallados en el marco de la búsqueda del cuerpo de Miguel Bru determinaron que no son humanos. El rastrillaje se realiza en Berisso, en un cañaveral en las calles 13 C y 170. Hoy se encontraron varios huesos más que serán analizados por un paleontólogo y una antropóloga del Museo de Ciencias Naturales de la UNLP. Además se desenterraron un portadocumentos, un anillo y un trozo de tela verde, que en una primera instancia no fueron reconocidos por Rosa Bru, mamá de Miguel.
Los análisis se realizaron sobre 10 huesos que fueron encontrados la semana pasada junto a una suela de zapatilla enterrados bajo un metro de tierra. La búsqueda a cargo del fiscal Fernando Cartasegna y la forense Mercedes Lojo, de la Asesoría Pericial de La Plata, se concentra en la zona donde se encontró una construcción de material sobre el suelo, que tenía encima dos chapas y unas vigas de hormigón armado, similar “a una tumba”, expresó Rosa Bru.
Los restos recolectados esta mañana serán analizados hoy y “mañana a primera hora sabremos si pertenecieron a una persona”, aseguró Cartasegna. En ese caso, en una segunta etapa de cotejarían con el ADN de Rosa Schonfeld y Néstor Bru, padres de Miguel. Mañana continúa la búsqueda, que se suma a los casi 40 rastrillajes realizados durante estos años para encontrar a Miguel, secuestrado, torturado, asesinado y desaparecido por policías de la Comisaría Novena de La Plata el 17/8/93.
¿Dónde está Miguel? Estudiarán huesos hallados en Berisso
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En la búsqueda del cuerpo de Miguel Bru que se realiza en Berisso, en un cañaveral en las calles 13 C y 170, se hallaron dos huesos y una suela que podría ser de una zapatilla Topper, bajo un metro de tierra. Estos elementos serán analizados a partir de mañana por la forense Mercedes Lojo de la Asesoría Pericial de La Plata, para determinar si son humanos y en ese caso cotejar con el ADN de Rosa Schonfeld y Néstor Bru, padres de Miguel. Mañana continúa el rastrillaje.
“Mañana vamos a estar acá como todos estos días. Ojalá que después de 17 años esta espera y esta búsqueda sea la última”, afirmó Rosa Bru antes de que se levantara el rastrillaje, bajo el sol del mediodía. El fiscal Fernando Cartasegna aseguró que si los resultados no son positivos, va a ordenar el desmalezamiento de todo el lugar, que mide 30 por 20 metros. En ese caso se dividirá el lugar por cuadrículas para profundizar la búsqueda.
En el cañaveral había llamado la atención una construcción “como una tapa grande de material que está sobre el suelo, que tenía encima dos chapas y unas vigas enormes, como si fuera una tumba”, había explicado Rosa Bru. Los elementos recolectados hoy se hallaron a un metro debajo de esa estructura.
Según aseguró el fiscal Fernando Cartasegna, si se encuentran más restos el rastrillaje será realizado por un grupo de paleontólogos, arqueólogos y antropólogos del Conicet y el Museo de Ciencias Naturales de La Plata. Por ahora siguen a cargo los Bomberos voluntarios de Ensenada y Berisso, y Defensa Civil de esta ciudad, encabezados por el fiscal y sus instructores.
¿Dónde está Miguel? Empieza otra búsqueda
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“Tenemos muchas expectativas, mañana empiezan a mover la tierra y esa estructura de material que parece una tumba, esperamos que después de esto no tengamos que preguntar nunca más ¿Dónde está Miguel?” afirmó Rosa Bru luego que terminaran la limpieza del cañaveral donde comenzó la búsqueda de Miguel Bru, en 13 C y 170, Berisso. Este miércoles comenzará la inspección ocular y la división del lugar por cuadrícula, luego comenzará la recolección de objetos y el rastrillaje a cargo de un grupo de científicos.
“El lugar es un cañaveral donde hay una construcción, es como una tapa grande de material que está sobre el suelo, que tenía encima dos chapas y unas vigas enormes, como si fuera una tumba”, dijo Rosa, acompañada por su marido Néstor Bru y Nelly Gamboa, madre de Sandra Ayala Gamboa, la joven peruana que apareció violada y asesinada en un edificio del Ministerio de Economía bonaerense en 2007, que por entonces estaba siendo refaccionado. Desde el fin de semana el espacio fue custodiado por personal de Prefectura Naval Argentina y de la Policía Federal. El corte de las cañas y la limpieza estuvo a cargo de bomberos civiles de Berisso.
Según aseguró el fiscal Fernando Cartasegna, la búsqueda será realizada por un grupo de paleontólogos, arqueólogos y antropólogos del Conicet y el Museo de Ciencias Naturales de La Plata, en cumplimiento de la Resolución 1390 - aprobada por la Procuración de la Corte de la Provincia de Buenos Aires- que establece que las investigaciones donde se encuentre imputada la policía no debe estar a cargo de las fuerzas seguridad, sino de personal civil.
“Este es un reclamo constante desde la Asociación Miguel Bru y de otros organismos de derechos humanos, que casi nunca se cumple, ya que en la mayoría de los casos de gatillo fácil y de abuso policial, como es la misma policía la que investiga ellos arman las escenas de encubrimiento, cuando la instrucción debería estar plenamente a cargo de los fiscales y de instructores civiles, para romper con el cerco de impunidad”, dijo Rosa Bru. Pero agregó que espera con ansiedad que el fiscal confirme cuanto antes quienes integrarán el grupo de científicos y que confía que el rastrillaje se realice lo más pronto posible. “Estas fechas siempre son muy difíciles para nosotros, cada año, la navidad y el año nuevo son momentos de muchísima tristeza por la ausencia de Miguel. Es un hueco enorme, yo no tengo nada para festejar. Ahora espero que esta vez este dato sea cierto y podamos encontrar a mi hijo”, afirmó Rosa, refiriéndose a los mas de 40 rastrillajes que se realizaron estos años para hallar el cuerpo de Miguel.
Esta nueva búsqueda se originó a partir de la declaración de un testigo de identidad reservada en la causa que lleva adelante el fiscal Fernando Cartasegna sobre la desaparición de Miguel Bru, secuestrado, torturado, asesinado y desaparecido por policías de la Comisaría Novena de La Plata el 17/8/93. Hace una semana una persona dio un dato que coincide con el aportado por un taxista que hace unos meses declaró que un pasajero le dijo donde se hallaba Miguel Bru. La información indica que esta persona habría visto a un grupo de ocho personas en dos autos, con linternas, en medio de la oscuridad, en una situación confusa, con muchos movimientos extraños, en una madrugada en la época que desapareció Miguel. Luego esta persona vio manchas de sangre en el lugar.
En 1999 los ex policías Walter Abrigo y Justo López fueron condenados por las torturas, el crimen y desaparición de Miguel Bru. El ex comisario Juan Domingo Ojeda fue condenado a dos años de cumplimiento efectivo de la pena, pero recuperó su libertad con sólo ocho meses de prisión, al igual que el oficial Ramón Cerecetto, ambos declarados culpables del encubrimiento.
La Asociación Miguel Bru continúa exigiendo el procesamiento de los y las policías que estaban en servicio en la Comisaría 9° la noche del 17 de agosto de 1993, por considerarlos cómplices del hecho, así como la investigación penal al primer juez que entendió en la causa, Amílcar Vara, quien fue destituido en un jury por haber encubierto a la policía en 27 casos donde se hallaba imputado personal policial. Semanas atrás, en el marco del juicio a los policías que torturaron y asesinaron a Andrés Nuñez, testigos aseguraron que Vara estaba presente mientras Andrés y David Guevara eran torturados en la Brigada de Investigaciones de La Plata.
Para más información: El caso Bru
www.ambru.org.ar
Abandono y muerte en una comisaría
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El juez Juan Pablo Masi declaró la nulidad del pedido de elevación a juicio en la causa en la que se investiga la muerte de Maximiliano Díaz Subils, que sufría una infección pulmonar y falleció abandonado a su suerte el 19 de febrero de 2006 en la Comisaría 6ª de Tolosa.
“Tenemos esperanzas de que por fin se investigue el abandono que sufrió mi hijo, que pidió que lo atiendan durante 5 días y fue desoído por la policía, que eran responsables de su vida en ese momento”, dijo Norma, madre de Maximiliano. Díaz Subils estaba detenido en la Comisaría Sexta de Tolosa cuando un martes comenzó a ahogarse y tener dificultades para respirar. Solicitó con desesperación durante 4 días que lo atiendan. Recién el sábado en el hospital le detectaron una infección pulmonar, pero en lugar de internarlo lo medicaron y lo enviaron al calabozo. Falleció en su celda el domingo 19 de febrero de 2006.
La familia de Maximiliano, patrocinada por la Asociación Civil Miguel Bru, hace 5 años que solicita que se investigue este abandono como el causal de la muerte, por eso estaban en contra de la elevación a juicio solo por el delito de coacciones que había solicitado la fiscal Leyla Aguilar. La funcionaria nunca hizo lugar al pedido de investigación de la familia sobre el abandono y por el contrario entendía que se trataba de un homicidio culposo que debía ser investigado por la UFI 10.
La titular de esta última fiscalía, la Dra. Scarpino, en discrepancia con Aguilar sostuvo que el personal policial que tenía a cargo el control y la asistencia de Maximiliano no le otorgó la asistencia médica que su estado merecía, y que hubo conciencia, voluntad y falta de interés de la policía.
Esto coincide con la hipótesis de la familia de Maximiliano y la AMB, quienes han sostenido al cabo de todo el proceso que resulta claro que el joven fue víctima del delito de abandono de personas seguido de muerte. Además consideran que no resultaría ajeno al menos un profesional de la salud que se desempeñaba en un hospital público y que se negó a atenderlo, así como personal policial de la Comisaría 6ta, que no obstante la evidente gravedad en el estado de salud de Maximiliano lo dejaron agonizando en el interior del calabozo, en una situación de desamparo e indefensión total, durante al menos las últimas 14 horas de vida de la víctima.
Masi -interinamente a cargo del Juzgado de Garantías Nro 2. del Departamento Judicial de La Plata- coincidió con la Dra Scarpino, y en diciembre determinó que a partir de la lectura de las constancias y según las características de la muerte de Maximiliano, no es posible separar la investigación en conductas dolosas y culposas, como temerariamente alentaba Aguilar, sin vulnerar garantías constitucionales, e incluso propiciar el dictado de sentencias contradictorias.