14
May
2013

Constantes lagunas entre los testigos del gatillo fácil.

Escrito por ambru el 21:14 3 comentarios
Categoria: Noticias

En la sexta audiencia del juicio contra cinco ex policías de la Comisaría Novena, imputados por torturas seguidas de muerte contra Daniel Migone, declaró un detenido que afirmó que tras lo sucedido, fueron encerrados para que no pudieran hablar con nadie. Mañana declaran otros policías de esa comisaría, la misma donde torturaron, asesinaron y desaparecieron a Miguel Bru el 17/8/93.

Fabián González estaba detenido el 5 de noviembre de 2005, cuando Daniel apareció asesinado en la celda de contraventores de la novena, una hora después de haber sido detenido. En su relato González dijo que ningún detenido dio instrucciones al resto de lo que tenían que declarar, en coincidencia con otros testimonios de la semana pasada. Recordemos que el testigo que fue procesado el miércoles por falso testimonio, había querido deslizar la versión de que uno de los detenidos armó un complot para acusar a los policías. Además aseguró que cuando vieron el cuerpo de Daniel tirado en la celda de contraventores “nos encerraron y ni siquiera pudimos hablar con nadie”, aseguró.
Además declaró Aníbal Serrano, el policía que acudió por una denuncia a una casa donde Daniel estaba pateando la puerta. El funcionario contó que llegó con el oficial Fuertes en su móvil y encontraron a Migone en la vereda quejándose de que su novia estaba adentro y no lo quería recibir. Fuertes entró a la casa y luego le aseguró a Daniel que “la chica estaba con otro y no lo quería ver”. Hablaron largo rato con él para convencerlo de que se fuera. En ese diálogo, Daniel les contó que trabajaba en una pollajería, que tenía dos hijos y que quería mucho a la chica. Finalmente se fue. Lo siguieron, vieron que pedía un helado y seguía su camino.
Poco después los efectivos fueron llamados a la comisaría a través del radio. “Vi que había muchas corridas y bajé” dijo Serrano. Dentro de la novena, se enteraron que un detenido “se había ahorcado” y que era el mismo de la denuncia de un rato antes. “Sacaron a una persona y la subieron a la caja de otra camioneta que manejaba Prato. Fuertes fue en la caja con el cuerpo. Yo en otro móvil los acompañé hasta el Hospital San Martín”, detalló.

En coincidencia con las declaraciones de los demás policías, para preguntas precisas no recordó detalles importantes, argumentando que esa noche ”no prestó atención a lo que pasaba”. Al ser interrogado sobre quien les ordenó ir a cuerpo médico, o quien les dijo que Daniel se había ahorcado, no se acordó de nada, mostrando un desinterés llamativo y poco creíble, como si la muerte de Daniel hubiera transcurrido como un hecho insignificante dentro de la dependencia.