A 19 años de la desaparición de Miguel
Categoria:
Después de 19 años seguimos exigiendo la aparición del cuerpo de Miguel y sinceramente creemos que lo vamos a encontrar. Seguimos exigiendo que los responsables de su desaparición y los funcionarios encargados de buscarlo nos digan dónde está Miguel. Creemos que será muy importante no solo para la familia y para los compañeros y amigos que esto suceda, sino además para toda la sociedad. Desde lo cotidiano vemos como se encuentran los cuerpos de las víctimas del genocidio de estado y confiamos que con Miguel sucederá lo mismo.
El 17 de agosto se cumplen 19 años desde que nuestro compañero Miguel Bru, estudiante de esta facultad, de veintitres años, fue torturado, asesinado y desaparecido por policías de la Comisaría Novena de La Plata. Días antes había denunciado a efectivos de esa dependencia por un allanamiento ilegal en su casa. A partir de ese momento comenzó a ser amenazado y hostigado para que retirara la denuncia.
Miguel fue secuestrado cerca de Bavio el 17 de agosto de 1993. Las declaraciones de varios detenidos en la Novena y las pericias en el libro de guardia, permitieron comprobar que fue ingresado en esa seccional, entre las 19 hs y las 20 hs de ese día, donde fue visto por última vez mientras era torturado. Luego del jury político al juez de la causa Amilcar Vara, donde se comprobó en 26 causas diferentes que era encubridor de la policía, llegamos en 1999 al juicio oral y público en donde se condenó a perpetua a los ex policías Walter Abrigo y Justo López, por su muerte y desaparición, y por encubrimiento al ex comisario Domingo Ojeda y al ex oficial Ramón Ceressetto.
Todo esto sucedía en un contexto donde la política represiva de la última dictadura cívico militar fue continuada por parte de las fuerzas de seguridad en la apertura democrática, sus actuaciones no habían sido revisadas, y además contaban con la tutela del poder político, que encontró ahí la posibilidad de acrecentar y perpetuar un modelo económico neoliberal. Sus principales víctimas fueron los jóvenes de sectores excluidos de derechos. El enemigo interno ya dejaba de ser el joven subversivo que pensaba un país para todos y todas, y pasaba a ser el joven pobre que no estaba incluido en un proyecto de país para unos pocos. Todo esto con el apoyo de los medios masivos de comunicación, “expertos en la denominación del mundo”, siempre bajo un punto de vista aparentemente ecuánime y liberal, que pedía mas represión, mas seguridad, mientras hacían sus negocios.
Con respecto a la causa de Miguel, hace pocos días recibió el beneficio de salidas transitorias Justo José López, uno de sus asesinos y único detenido que queda en esta causa, ya que Walter Abrigo murió en la cárcel. López sigue sin reparar su daño y sin mostrar arrepentimiento. Creemos que continua perpetrando su crimen ya que nos sigue torturando con el secreto de donde está el cuerpo de Miguel. El fallo de su beneficio con salidas transitorias, que le otorgó la Cámara Penal de La Plata, sin duda se ajusta a las reglas del derecho, estamos parados exactamente en la vereda de enfrente de los profetas de la mano dura. Pero también desde lo cotidiano vemos como nuestras cárceles están abarrotadas de presos y presas con prisión preventiva, o con condenas cumplidas, o en condiciones de obtener salidas transitorias. Entonces exigimos que la justicia sea igual para todos y todas y no para unos pocos privilegiados. Además las condiciones de detención son totalmente distintas cuando se trata de agentes de las fuerzas de seguridad, el asesino de Miguel gozaba de los mismos privilegios que Franchiotti, asesino de Kosteki y Santillán; o Poblete, el asesino del maestro Fuentealba, para citar solo algunos ejemplos.
El 20 de agosto de 2002 se creó la Asociación para institucionalizar el trabajo que Rosa Bru y la Comisión de Familiares y Amigos de Miguel venían realizando, para que la experiencia adquirida en el marco de la lucha por el Caso de Miguel pudiera ser transmitida y sirviera a otras personas que pasaran o estuvieran pasando por experiencias similares.
Desde la Asociación seguimos exigiendo, además de la aparición de Miguel, la investigación penal al resto de los policías que estuvieron presentes en la Comisaría Novena la noche del crimen y al ex juez Amílcar Vara.
En estos 10 años ha brindado patrocinio jurídico, asesoramiento y acompañamiento a infinidad de personas que acercaron sus denuncias a la entidad. Este trabajo lo realiza junto a un equipo multidisciplinario que colabora con la entidad.
Por mencionar un ejemplo de esto, hace 20 días que se desarrolla en los tribunales platenses con el patrocinio de la Asociación el juicio por Christian Domínguez, quien en febrero de 2005 fue asesinado en la Comisaría Primera de Berisso, En este caso, al igual que en tantos otros, encontramos las mismas condiciones que en el crimen Miguel, que posibilitaron un caso de gatillo fácil. Decimos esto porque nos llevó siete años de lucha y remover tres fiscales para poder llegar al juicio. En las audiencia varios testigos ya acreditaron la detención ilegal de Christian, las torturas que sufrió en la Comisaría, la estrategia de la policía para montar la versión de que se suicidó con su cinturón, y la red de encubrimiento policial que contó con la connivencia del fiscal de turno, Leandro Heredia, que delegó la investigación en los mismos policías sospechados.
Además, la asociación también viene desarrollando proyectos de investigación con diversas instituciones académicas, trabajos territoriales en contextos de exclusión, programas en medios de difusión. En 2005 abrió una sede en CABA, la “Casa de Oficios y Cultura de Parque Patricios”, donde se trabaja en la promoción de la inclusión social y los derechos de adolescentes y chicos en situación de calle.
Por último, seguimos creyendo que es posible tener fuerzas de seguridad que respeten los derechos de las personas, para esto es imprescindible la decisión política del control civil de las mismas, en donde las organizaciones de Derechos Humanos, los vecinos y vecinas, los referentes sociales, las instituciones académicas -entre otros- deben tener un rol fundamental. Saludamos el proyecto político nacional de políticas públicas en pos de una transformación de las fuerzas de seguridad y también a nivel provincial el impulso del proyecto para la creación de la policía judicial, reclamo que venimos realizando las organizaciones de ddhh desde hace mucho tiempo.
Asociación Miguel Bru